TEATRO y VINCULO

Hay tantas formas de definir el VINCULO…conectar, compartir, interactuar, relación, unión, apego, construir…

El vínculo se construye, necesita tiempo y dedicación, como el personaje del zorro en el Principito: “Cada día me iré acercando un poco más a ti…” “Y tu rosa ya no será cualquier  rosa, será única entre todas las rosas…”

Uno de los significados del vínculo es que dejamos de ser uno más para ser alguien para el otro, creamos una sensación de pertenencia, de lugar, de comunidad.

Esto es una de las razones por las que es tan importante para el ser humano ser visto, ser reconocido, desde niños buscamos esta seguridad y de adultos la seguimos necesitando en el día a día, en acciones cotidianas, en verdad muchas de las discusiones, roces, separaciones vienen de esa dolorosa sensación de “no ser visto”.

¿Y necesitando tanto vincularnos, por qué tantas dificultades para vincularnos? ¿Para relacionarnos? ¿Para estar en intimidad?

La manera en la que aprendimos a vincularnos se pondrá de manifiesto en nuestra forma de relacionarnos, si ahondamos debajo de un conflicto surgirá la manera en cómo me dolió aquella otra situación pasada, construimos sobre antiguas heridas y nuestras respuestas son tan rápidas que apenas nos da tiempo a darnos cuenta.

Naturalmente cada uno ve lo suyo, de forma que la comunicación se hace difícil para empatizar, escuchar, entender y tener una mirada compasiva sobre la otra persona.

¡Seguimos como niños viendo el trozo del pastel que más nos gusta y no fui yo, fuiste tú!


El camino de aprender a comunicarse es lento y lo más complejo es que  la comunicación está vacía si no implica emociones, vulnerabilidad y apertura, sin estas cualidades somos seres parlantes desconectados… Que sí, hablamos bien, podemos decir “Te quiero”, porque nos dijeron que había que decirlo, pero hay todo un lenguaje no verbal, emocional y de contacto sin el cual no comunicamos nada y tampoco vinculamos.

Que herramientas aporta el TEATRO a la hora de VINCULARNOS:

Cuando hablamos de TEATRO y VINCULO podríamos decir que lo que creamos con las palabras no es tan importante como lo que creamos entre nosotros al mirarnos, lo que nazca entre nosotros es lo importante, el texto será sólo el vehículo, pero estarán pasando un montón de cosas más que recogerán nuestras miradas, nuestros gestos, nuestra respiración, nuestro movimiento…

Pararnos ahí, detenernos, registrar lo que me ocurre, recibir al otro, ejercitar la escucha, los sentidos, la percepción, que cambia cuando te miro, cuando estás y no estás… ver en suma al otro mientras me veo a mí.

A continuación, comparto cinco herramientas que nos ofrece el teatro a la hora de desarrollar nuestra capacidad de vincularnos:

  • Desarrolla mi capacidad de escucha y de presencia activa conmigo, con el otro y con el grupo.
  • Creo una situación imaginaria en la que yo soy un elemento más de la creación, aparece la vivencia de pertenencia.
  • Darme cuenta de que hay otras realidades, otras formas de sentir, me hago más flexible y por tanto más capaz de empatizar y de entender al otro.

  • El personaje o el roll que interpreto dentro de un conflicto me enseña mi patrón de respuesta y otras respuestas posibles.

  • La expresión de mis emociones en un lugar seguro me enseña a vincularme en la INTIMIDAD.

¡Hasta la próxima semana!

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